David Copperfield - Segunda Parte - Capítulo VIII

22/12/2010 9.060 Palabras

David Copperfield Segunda Parte: Capítulo VIII de Charles Dickens Hasta que llegó el día de recibir a mis antiguos amigos viví principalmente de Dora y de café. En el estado de enamoramiento en que me hallaba, mi apetito languidecía; pero yo me alegraba de ello, pues me parecía que habría sido un acto de perfidia hacia Dora el haber podido comer de un modo natural. La cantidad de ejercicio que hacía no daba en este caso los resultados de costumbre, pues las decepciones contrarrestaban los efectos del aire libre. Tengo también mis Judas (fundadas en la aguda experiencia adquirida en aquel período de mi vida) de si el goce del alimento animal podrá experimentarlo una criatura humana que esté siempre atormentada por las botas estrechas. Y pienso que quizá las extremidades requieren estar libres antes de que el estómago pueda actuar con vigor. Con ocasión del pequeño convite, no repetí los extraordinarios preparativos de la otra vez. Únicamente preparé un par de...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info