Historia En 1479, Fernando el Católico era rey de Sicilia y trataba de mantener su alianza con Nápoles —reforzada por el matrimonio entre Ferrante o Fernando I de Nápoles (1458-1494) y Juana de Aragón, hermana de Fernando—, así como de recuperar el gobierno de Córcega. Su objetivo era dominar el Occidente mediterráneo, lo cual en parte ya hacía a través de las costas del reino de Aragón, Sicilia y el régimen de protectorado que pretendía mantener sobre Nápoles. Le preocupaba la amenaza cada vez más cercana de una invasión otomana a Italia —que estaba militarmente mal organizada y apenas podía defenderse—, por lo que propuso una alianza entre Nápoles, Genova, los Estados Pontificios y Aragón, incluyendo Córcega, para mantener una flota permanente que defendiese las costas.