El Estado de Israel

24/10/2023 8.977 Palabras

Introducción Cuando agonizaba, Franz Kafka soñaba con Palestina. Decía a la última mujer de su vida: «vámonos a Jerusalén, y allí trabajaré de jardinero...». luego, temiendo que se confundiera su ansia con una forma poética de lirismo, añadía: «o de camarero, o de lo que sea...». Cuando Franz Kafka murió (1924) había en el mundo unos quince millones de judíos, la mayor parte de ellos en Europa. Vivían diariamente la sensación de exilio: formaba parte de su vida cotidiana y de su lamentación. La frase «el año que viene, en Jerusalén» es del profeta Isaías, unos 700 años a.C., y sigue estando en sus oraciones. Es la consigna del sionismo: una fuerza milenaria que comenzó a tener valor político a finales del siglo XIX, que cuajó con la proclamación del estado de Israel en 1948 y que vive a finales del siglo XX una considerable angustia dentro de una zona ensangrentada, móvil y en una perpetua agitación. Mucho dolor, muchos muertos, propios y ajenos: una historia de rudeza y crueldad que es parte de la historia del mundo en este final de siglo XX. Está sin dirimir.

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info