La isla del tesoroCapítulo 27: ¡Doblones .de Robert Louis Stevenson Como el barco estaba tan escorado, los mástiles sobresalían sobre las aguas, y a la altura que yo estaba, en la cruceta, veía baj ...
CAMBRIDGE ha reabierto sus puertas en marzo de 1667. Se reanuda la actividad académica en el Trinity College. Este amargo paréntesis de la Gran Peste ha servido a muchos científicos para ordenar sus ...
Odisea Canto V: Odiseo llega a Esqueria de los feacios.de Homero 1 Eos se levantaba del lecho, dejando al ilustre Titonio, para llevar la luz a los inmortales y a los mortales, cuando los dioses se ...
IntroducciónWINSTON Churchill leyó el mensaje real en Washington, adonde había vuelto. También añadió una condecoración más a su panoplia: las alas de la R.A.F., concedidas por cuatrocientas horas de ...
YermaSegundo Actode Federico García Lorca CUADRO PRIMERO(Canto a telón corrido. Torrente donde lavan las mujeres del pueblo Las lavanderas están situadas en varios pianos.)CANTAN:En el arroyo fríolavo ...
NUMEROSOS espíritus libertarios han evocado —a veces por ignorancia— el nombre de Thomas Müntzer. Este patético héroe de los oprimidos merece aquí un lugar aparte, por haber sido un personaje muy ...
Las mil y una noches - Tomo II Pero cuando llegó la 114ª nochede Anónimo PERO CUANDO LLEGO LA 114ª NOCHEElla dijo:El hermoso Aziz prosiguió de este modo su historia:Y me perfumó con sus manos, ...
Un marido idealCuarto actode Oscar Wilde Escenario: El mismo del segundo acto.LORD GORING está en pie ante la chimenea, con las manos en los bolsillos. Parece muycontrariado.LORD GORING.- (Saca su ...
Las mil y una noches - Tomo IV Y cuando llegó la 739ª nochede Anónimo Y CUANDO LLEGO LA 739ª NOCHEElla dijo:"... Y en el pedestal de bronce vió la lámpara encendida. Y tendió la mano y la cogió. Y ...
1 • Retrato de la madre de Renoir (Marguerite Merlet), 1860Óleo sobre lienzo, 45 x 38 cmColección particular2 • Pierrot y Colombina, 1861Óleo sobre lienzo, 28 x 23 cmColección particular3 • Bañista ...
Reproche musicalde Evaristo Carriego Si te sientas como anoche junto al piano, a mis ruegos insensible, taciturna: fugitiva de aquel aire wagneriano que tú sabes. Sí, cual trágica nocturna traes la ...
Esta es la versión para imprimir de La corona de fuego o los subterráneos de las torres de Altamira.Si imprimes esta página, o eliges la opción de Vista preliminar de impresión en tu navegador, verás ...
I& 160;036Pág. 036 de 127La lucha por la vida III Segunda partePío BarojaJuego de bolos, juego de ideas, juego de hombresHay entre Vallehermoso y el paseo de Areneros una ancha y extensahondonada que ...
Los duendes de la camarilla Capítulo Vde Benito Pérez Galdós -Aunque usted se enfade, aunque usted me pegue -contestó Lucila sacando las palabras del seno de su intensa amargura-, le digo... ...
A Juan José de Soiza Reillyde Evaristo Carriego Al astrólogo ensueño, sus novias: las estrellas, contáronle el secreto de unas cosas tan bellas que un ruiseñor lunático, que cantaba a las rosas, puso ...
A los pies de Venusde Vicente Blasco Ibáñez Segunda Parte& 160;: LA FAMILIA DEL TORO ROJOIIIEN EL QUE SE HABLA DEL RUIDOSO TRIUNFO DEL VICECANCILLER, DE LA BELLA JULIA, «ESPOSA DE CRISTO» Y DE SU ...
Al Ecce-Homode Fernán Caballero El lisonjero juez que para su rey ha habido por interés de su gracia y por no perder su oficio. En un balcón de su casa, azotado y escupido, pa ...
Ana KareninaSegunda parte: Capítulo XXIde León Tolstoi La cuadra provisional donde habían llevado su yegua el día anterior era una construcción de madera al lado mismo del hipódromo.Vronsky no la ...
Capítulo X& 160;11Pág. 11 de 27Del frío al fuegoFelipe TrigoHan barrido las olas. Se las ha llevado consigo el viento y no queda más que el patio infinito de suelo de cristal en que ellas juegan a l ...
Novelas y cuadros de la vida sur-americana Dolores (Cuadros de la vida de una mujer)de Soledad Acosta de Samper Parte primera La ...
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